Yerry Mina no pasó desapercibido en su estreno oficial con el Cagliari en la Serie A. El defensor colombiano fue titular en el empate 1-1 ante la Fiorentina, en un duelo que lo tuvo como protagonista por sus intervenciones en defensa, un error en el gol del rival y, sobre todo, un tenso cruce con Moise Kean.
El episodio se dio cuando Mina logró cortar una acción clara de Kean que quedaba frente al arco. El colombiano celebró la jugada en la cara del delantero, lo que desató la reacción inmediata del italiano, quien le recordó que el marcador todavía estaba 0-1.
Más allá de ese roce, el colombiano dejó sensaciones mixtas. En el tanto de la Fiorentina, fue superado en el juego aéreo por Rolando Mandragora, pese a su ventaja en altura (mide 1,95 metros, mientras que el rival 1,83). Su frustración se reflejó en un reclamo a sus compañeros por permitir el centro y en un gesto de impotencia hacia sí mismo al percatarse que perdió la marca.
Mina también buscó aportar en ataque. Tuvo una opción clara de gol que se fue por encima y en los minutos finales conectó de cabeza un balón tras tiro libre, aunque sin mayor peligro para el arco defendido por David de Gea.