Para mayo de 2025, la deuda externa ascendió a US$207.657 millones, según informó el Banco de la República. Esta cifra representó 49,2% del PIB y significó un leve descenso frente a abril, cuando se ubicó en US$207.828 millones.
En cuanto a la composición, la deuda pública alcanzó US$116.774 millones y la privada US$90.882 millones. Ambos rubros también registraron ligeras disminuciones con respecto a las cifras de abril de 2025. Como porcentaje del PIB, la deuda pública representó 27,6% y la privada 21,5%. De esta manera, las cifras de endeudamiento se mantuvieron estables entre abril y mayo de 2025.
En lo que va de 2025, la deuda ha aumentado cerca de US$5.000 millones. En enero, el monto total fue de US$202.077 millones, equivalente a 48,2% del PIB. Para esa fecha, la deuda pública se ubicó en US$113.602 millones de dólares y la privada en US$88.475 millones.
Si bien las cifras muestran que no ha habido variaciones abruptas en los montos, desde abril de 2025 la deuda externa ha representado de manera constante 49,2% del PIB. En febrero de 2025 se registró la proporción más baja hasta mayo de ese año, con 48% del PIB.
Cabe recordar que en mayo de 2024 la deuda externa alcanzó 50,5% del PIB, con un total de US$196.920 millones. Desde entonces, no se han registrado niveles superiores a la mitad del PIB.
Poniendo aún más la lupa sobre las cifras históricas de los últimos años, en mayo de 2021 se reportó un aumento considerable de la deuda externa como porcentaje del PIB, alcanzando 57,7%. En ese periodo, la deuda pública equivalía a 33,7% del PIB, mientras que la privada llegaba a 24%.
En cuanto a las cifras históricas, en julio de 2020 la deuda pública ascendió a US$83.718 millones, lo que representaba 28,6% del PIB. Por su parte, la deuda privada se ubicó en US$66.940 millones, equivalente a 22,8%. En total, para ese momento, la deuda externa sumó US$150.659 millones, representando 51,4% del PIB.
Fue en 2021 cuando se registraron las variaciones más altas. En enero, la deuda externa comenzó en US$155.367 millones, equivalentes a 57,3% del PIB. A lo largo de los meses siguientes, continuó su ascenso como proporción del PIB, hasta alcanzar su máximo de 57,7%.
Tras la culminación del primer semestre de ese año, es decir, en junio, la deuda retrocedió ligeramente, ubicándose en US$157.996 millones y representando 54% del PIB.